Descanso en la oficina para un anal con el jefe
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Con más de setenta años esta vieja tiene el coño más caliente que cuando era una jovencita, fíjate lo que te digo. Viuda desde hace más de 10 años, la gente piensa que se recluye en su casa a llorar a su marido muerto, sin ganas de nada. No podrían estar más equivocados: si no sale, es porque está más que entretenida. Fue en su madurez cuando descubrió los juguetes sexuales, y ojalá los hubiera conocido antes, cuando su esposo le metía esas folladas tan ridículas. Ahora sí que está disfrutando del sexo, aunque sea a solas; y está teniendo los mejores orgasmos de su vida, qué pena ser ya una vieja y poder disfrutarlo menos tiempo.