Por dios, es que esta señora mayor necesita un desahogo inmediato, antes de que ese palo de esboca metido en su viejo coño la deja preñada… Bromas aparte, parece que a esta gorda sesentona su marido ya ni la mira, mucho menos la toca, y ella está que se sube por las paredes de cachonda. Necesita follar, eso está claro, y justo eso está pensando cuando el timbre interrumpe su masturbación xxx. Y como si sus plegarias fueran escuchadas, consigue enredar al repartidor para que entre en casa, y allí es donde va a saca para lograr que una polla en condiciones le eche un polvo que la cruja.