Mira que nos ponemos pesados los tíos cuando queremos follar, que es básicamente 24/7/365 porque raro es el día que no nos apetece meterla en caliente. Este tipo aún tiene más motivos para estar todo el puto día detrás de su señora queriéndosela follar y es que tiene un coño que no puede estar más jugoso. Lo bueno es que ella le sigue el juego y no le importa que la despierte de madrugada para echarle un polvo de estos guarros y rápidos. Eso lo que vais a ver y es la última vez que la despertó a las tantas de la mañana, le metió los dedos por el coño hasta que se mojó, se la metió, se corrió dentro y luego los dos a dormir a pierna suelta.